La economía del afecto
Los besos, los abrazos que no dasno se pueden guardar, se desintegranen ondas que caen por el desdeñoversado, frío y tenue de la alberca.Y así, abandonados a su suerte,perecen sobre el cuarzo del rocío. Ilustración El beso de Senju‘Kuchidzuke – A Sensual and Poetic Ode to Gustav Klimmt’