Soñé con tus ojos tibios,
en medio del sueño negro,
tu calma,
tu mano, amigo, sobre mi pelo,
tus labios sobre los míos.
tu aliento sobre mi aliento,
tu cuerpo.
En sueños yo te he besado.
Veteranas y entrenadas las lenguas.
Hondos los dientes.
A cada tiempo
en la alcoba oscura de mi sueño
te hallas
extiendes las manos
me tocas
y quieres besarme
después
durante horas
me apremia tu beso.
En sueños ya te he besado.
Lo hago de vez en cuando.
Nota: La magnífica ilustración es de Lorena Quilo, si estás leyendo el poema desde el móvil y no la visualizas, ve a las opciones de tu navegador y escoge “visualizar como el ordenador”