«Ven amado
Te probaré con alegría.»
Eunice Odio – Poema primero – Posesión en el sueño
Dulcísima ilusión la de nombrarte.
nombrar, con alegría, el momento preciso
en que mi cuerpo extiende el mar,
y tu cuerpo las velas.
Nombrar, con alegría, el momento precioso
en que extiendes las flores de marzo,
y yo, la lluvia alegre de abril.
Dulcísima ilusión la de esperarte,
soñándote alegre,
hombre pando y hermano
dueño de la espesura,
que despliegas tus ramas y recoges
abisal y extendido todo mi ser.
Dulcísima ilusión la de besarte,
beber, con alegría, de tu boca.
Construir en la argamasa de los labios
un refugio, soplar sobre la noche.
Entrar, con alegría, en las memorias
de tus besos.
Dulcísima ilusión la de abrazarte.
Nota: ¿Cuándo termina un poema? ¿Cómo saber cuándo los versos se asoman al vértigo? ¿Cómo adivinar cuando dar paso al silencio? Tres años más tarde del impulso que motivó su ser, creo que doy hoy por terminada esta “Mi dulcísima”
Que el 2021 les sea propicio