Niño herido sin familiares sobrevivientes
La semana se desbordó como un contenedor de melancolía derramada que nadie recoge, que nada contiene. Una amiga muy querida se despide para siempre de uno de los pilares de su vida. Qué difícil despedirse de un pájaro o de un violín o de una flor o de ti. El aliento siempre asciende y se escapa, pero el amor permanece. En una entrevista publicada en el País, un rapero, famoso y algo derrotado, declara que el género urbano pelea por pendejadas y nadie dice nada de Palestina. El horror es tanto que la música debería enmudecer. ¿Hay algo que podamos […]